Protege tu casa y sitio de trabajo de cucarachas y ciempiés

No hay un insecto que origina una peor imagen a un sitio, que una cucaracha, si en tu hogar, o incluso, si tienes un restaurante tienes presencia de este insecto, este artículo va dirigido hacia ti, pues se te dirá la forma adecuada para tratar dicha presencia no deseada. Ant Control de Plagas te recomienda la erradicación inmediata de otro insecto común en hogares y sitios de trabajos como lo es el ciempiés, del cual deberás tener cuidado porque puede ocasionarte infecciones en la piel, es por ello la importancia de contratar personal especializada en cómo lidiar con estas especies.

En tu hogar puede que hayas tenido la presencia de una que otra cucharacha, pero no le das mucha importancia, más allá de fumigar con el insecticida que consigas en el mercado. Pero si llegas a tener un plaga de ella, debes tener otro tipo de respuesta. De igual forma pasa en un restaurante, donde las leyes de salubridad te prohíben tener un ambiente con cucarachas, así que sigue al pie de la letra estás tres recomendaciones.

Revisa tu hogar / restaurante

No basta solo con acabar con una o dos de ellas y pensar que ya está listo. Debes encontrar de dónde están saliendo y acabar con esa fuente. Así que debes estar pendiente de aberturas o grietas en las paredes, techo, piso o puertas, porque de esa forma es que les permite entrar libremente y sin darte cuenta, ya tienes una invasión de cucarachas en tu cocina, y en el peor de los casos, en el área de preparación de alimentos de  un restaurante. También debes echar un vistazo a tu cuarto, porque puede ser que estén haciendo vida ahí, y otros insectos más.

Utiliza el olfato

De esta forma podrás detectar cualquier tipo de olor fétido, desde el cual las cucarachas se sientan atraídas. Lo primordial es evitar tener ese tipo de olor en tu cocina, pero de tener la mala suerte de presentar esa característica, debes obligatoriamente eliminarla. Si la comida está en mal estado o vencida, debes deshacerte de  ella inmediatamente, y verás como en los próximos días no notarás la presencia de ese insecto.

Pero no solamente tiene que ser un mal olor de la cocina, también puede ser de otra parte del local o de tu casa, por ejemplo el baño. No hay que ser expertos para determinar el porqué del olor en esa área, así que debes procurar tener una higiene perfecta para evitar esa situación.

En el peor de los casos, llama a los expertos

Cuando crees que la situación se salió de control y corre un riesgo sanatorio, debes acudir a Ant Control de Plagas, quienes se encargaran de la situación y te garantiza un tratamiento poco contaminante al humano.

El ciempiés

Ahora toca hablar de un insecto que podrás encontrar en los árboles o techos de las casas, incluso en las paredes subiendo o bajando de la misma, pero tiene una peculiar característica, y es que se alimenta de otros insectos, y es el ciempiés. Esta especie debes eliminarla una vez la veas porque son rápidos y puedes escaparse y multiplicarse.

A diferencia de otros insectos, este causa infecciones en la piel, por lo general los más afectados son los niños porque les llama la atención la fisonomía del mismo, que pareciera tener cien patas, no llega a esa cantidad.

Conoce su ambiente

El ciempiés suele propagarse en zonas húmedas como los espacios de tu jardín, pues en sitios secos, se deshidratan y mueren, así que si estás en un área con constante lluvias o zonas donde hay una constante fuente de humedad, estás propenso a sufrir de su visita.

Puedes acabar con ellos con insecticida, pero si la situación sale de control y no logras determinar de dónde salen, debes acudir con los expertos para que te guíen y te ayuden a eliminar ese insecto, el cual tiene un aspecto algo amenazador, y razones tiene, pues es capaz de llevarte al hospital.

La mejor forma de prevenir su visita, es sin duda teniendo tu hogar limpio, esa es la clave para evitar cualquier tipo de presencia de cualquier insecto, pero en este caso, si evitas tener un ambiente húmedo, con aberturas (como con las cucarachas), puedes estar tranquilo de tener su presencia.